El barco fenicio de Mazarrón pasará a conservarse en el Museo ARQUA de Cartagena
La nave se encuentra a tan solo 2,5 metros de profundidad y a 50 de la costa de Mazarrón, Murcia.
Reconstrucción del pecio Mazarrón II en el Museo Nacional de Arqueología Subacuática de Cartagena.
Irene Pérez, 12/03/2021
El barco fenicio Mazarrón II actualmente conservado bajo el agua pronto volverá a la superficie y será tratado y conservado en el Museo Nacional de Arqueología Subacuática.
Este barco de aproximadamente 2.600 años se hundió en el litoral murciano con un cargamento de plomo litargirio, producto utilizado para obtener plata. Debido a movimientos en los fondos marinos, el Ministerio de Cultura ha decidido sacarlo a la superficie para evitar daños.
Desde su descubrimiento se encuentra protegido bajo una cúpula de acero pero parece ser que, aun así, el barco corre peligro ya que esta capa metálica podría terminar aplastándolo.
La nave se encuentra a tan solo 2,5 metros de profundidad y a 50 de la costa de Mazarrón, Murcia.
Al rescate del barco más antiguo del mundo.Mazarrón(Murcia) estudia extraer su barco fenicio https://t.co/lUmsh0m5Qk pic.twitter.com/A64WcS8TqX
— Nauta360 (@Nauta360) November 24, 2015
Fue localizado en 1995 por un grupo de buceadores. En octubre de 1991 y enero de 2001 se procedió a la extracción y documentación de su cargamento, compuesto además del plomo mencionado, por un ánfora, un molinillo de mano, una espuerta de esparto con asa de madera, restos de cabo de esparto de diversos grosores y por un ancla.
Este importante hallazgo documentó por primera vez y de modo excepcional la vía marítima de la explotación del metal que los fenicios practicaron en la Península Ibérica, algo que solo conocíamos por textos clásicos. Además, este yacimiento dio a conocer por primera vez la construcción naval, la vida a bordo, el sistema de estibado y abarrotado y el uso de anclas construidas más antiguo que se conoce.
Para difundir este conocimiento, las administraciones implicadas pretender organizar unas jornadas internacionales a lo largo de este año pues no hay que olvidar que el fin último de los museos es que el público conozca su patrimonio.