16ª MEDALLA (Moscú 1980). PLATA en Atletismo (50 km Marcha) LA MARCHA ABRE EL CAMINO DE LAS MEDALLAS EN ATLETISMO
La marcha abriría el camino de los preseas, en esta ocasión, con Jordi Llopart, en 50 kilómetros marcha, un Bronce dorado
Medalla de España
Jorge Gómez Manzanilla, http://latribunamadridista.com/ 10/03/2021, 09:00h
Redacción: Jorge Gómez-Manzanilla-Abel Alaminos-Pedro Cánovas/ LaNocheDelDeporteEspañolTV-deporteolímpico.net-blogolímpico.com
La primera de las medallas para el atletismo español en unos Juegos Olímpicos llegó de la marcha y en concreto, de Jordi Llopart que en los Juegos Olímpicos de Moscú 1980, como hemos venido reiterando en el análisis de medallas anteriores, los Juegos del Boicot a la URSS por la invasión de Afganistán y las amenazas norteamericanas a los países de retirar pasaportes si acudían a tales Juegos.
España que como ya hemos indicado no quería acudir por querer entrar en la OTAN, no así el presidente Adolfo Suárez pero si gente de su gobierno, como Calvo Sotelo, posteriormente, presidente del gobierno tras la dimisión de Suárez y el posterior intento de golpe de Estado del 23F, el famoso Tejerazo, de ahí que quisieran hacer un guiño a los yanquis para poder en la mencionado Tratado del Atlántico Norte algo con lo que afortunadamente, nuestro COE no estuvo de acuerdo y al final se decidió dejar vía libre a las federaciones para elegir si acudían o no a las olimpiadas moscovitas, bien como el Atletismo estuvo en la capital del Telón de Acero y como llegaba además, la primera de las muchas medallas que nos ha dado este deporte.
Además y al igual que ocurriría en nuestros mejores olimpiadas, las de Barcelona 1992, la marcha abriría el camino de los preseas, en esta ocasión, con Jordi Llopart, en 50 kilómetros marcha, un Bronce dorado para todo un pionero en este deporte que como siempre, por los intransigentes de siempre por catalogarlos de alguna manera, le llamaban mariquita al ver a nuestro Jordi entrenar y mover las caderas, una técnica que estos ignorantes de la vida, desconocían que se trataba de un duro deporte y de evitar ser descalificado ya que siempre tienes que tener un pie apoyado en el suelo para no ser penalizado y a las tres penalizaciones eres descalificado o descalificada.
Dicha técnica le llegó de su padre, Moíses, posiblemente, el primer marchador que tuvo nuestro atletismo y cuyo herencia la recogió el bueno de Jordi para primero ser campeón de Europa en Praga en 1979, un título continental que le llevó a callar bocas y a darse a conocer.
Posteriormente, entrenaría durante dos años en Méjico dado que la altura que presumiblemente tendría en Moscú unida a la humedad que luego no fue tal, si le permitiría estar preparado para la prueba.
Desde luego, su entrenador sabía de la importancia de todo ello y quiso dar pasos idénticos a los de uno de los grandes favoritos, el mejicano, Raúl González que luego no estuvo ni en la pelea por las preseas.
El que sí estuvo fue el alemán Hartwing Gauder y el soviético Boris Yakovlev, el primero finalmente medalla de ORO, dos minutos más rápido que nuestro Jordi Llopart que logró la medalla de PLATA con un tiempo de 3:51.42 mientras que Yakovlev fue BRONCE.
Otro de los españoles que también aspiraban a todo, Josep Marín logró una meritoria sexta posición, un diploma olímpico que nunca se reconoce en unos Juegos y que significada, nada más y nada menos que ser Octavo, como mínimo, del Mundo.
Desgraciadamente, nuestro Jordi Llopart falleció el pasado año víctima de un infarto y con su muerte se ha consumado la conocida como tragedia del Podio Moscú 1980 con la muerte de los tres medallistas en aquella prueba olímpica, marcha 50 km, en la capital moscovita.
Ninguno de los tres ha sobrevivido pasados los 40 años de dichas medallas y además, en el caso del alemán Gauder y del español Llopart, ambos han muerto con siete meses de diferencia y por la misma causa, un infarto.